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?Cuanto va an extenderse Pablo Casado a la comienzo del PP? La carta de Barcenas al fiscal anticorrupcion agrava la etapa del lider del PP

?Cuanto va an extenderse Pablo Casado a la comienzo del PP? La carta de Barcenas al fiscal anticorrupcion agrava la etapa del lider del PP

. Porque por demasiado que se esfuercen en afirmar que las acusaciones nunca afectan a la actual directiva, que son cosa del anterior, no se lo traga ninguna persona

En caso de que acierta el uacute;ltimo sondeo del CIS (relativo a las elecciones catalanas), la enfrentamiento interna Con El Fin De cambiar al liacute;der del PP empezaraacute; en el interior de pocas semanas. Si ese partido supera a Vox en las comicios catalanes la crisis podriacute;a retrasarse un tiempo. Sin embargo nunca abundante. Nunca realiza falta estudiar bastante las encuestas. Basta con observar las imaacute;genes que de Casado salen en las teles. Un viento sobre agotamiento asoma bien en su rostro, su observacion estaacute; cada ocasii?n maacute;s perdida y el que salga diacute;a siacute; y diacute;a tambieacute;n en las pantallas, para no decir nada o aseverar sandeces, nunca permite sino sugerir que sus asesores bien no saben por doacute;nde soltar. Casado nunca encabezaraacute; las listas del PP a las proacute;ximas elecciones generales.

Referente a Cataluntilde;a no junto a hacer predicciones. Porque el porcentaje potencial de votos sobre los dos partidos derechistas en lucha es demasiado pequentilde;o como para elaborar anaacute;lisis maacute;s pormenorizados. Y por motivo de que son tan poco brillantes las candidatos de uno asi­ como otro, por no declarar mediocres o algo maacute;s, que tampoco junto a procurar la pista del concebible efecto en el empuje personal que alguno de ellos pueda aportar a su partido. Desde luego la derecha lo tiene crudo en Cataluntilde;a y no ha transpirado ese es otro sobre las fallos gordos sobre Casado.

La flamante carta sobre Luis Baacute;rcenas al fiscal anticorrupcioacute;n agrava la situacioacute;n del liacute;der del PP. Porque por demasiado que se esfuercen las portavoces del PP en declarar que las acusaciones nunca afectan a la actual direccioacute;n del partido, que son cosa del anterior, ese mensaje no se lo traga ninguna persona. Casado nunca puede separarse del escaacute;ndalo que apartoacute; al PP del Gobierno y que le provocoacute; una sangriacute;a electoral que soacute;lo posee el precedente en la que sufrioacute; la UCD de las primeros 80. Primero, hacia Ciudadanos. Posteriormente, hacia Vox, que posee su principal fuente sobre votantes en la corrupcioacute;n del PP, en el rechazo que eso produce en un grande sector de los votantes sobre la derecha.

Y por motivo de que, no obstante mozo, eacute;l estaba en la direccioacute;n que cometioacute; esas tropeliacute;as, porque era xpress un adulto sobre seguridad de Mariano Rajoy, que fue quien las autorizoacute; si no las promovioacute;, y no ha transpirado por motivo de que luego se entregoacute; en brazos sobre Joseacute; Mariacute;a Aznar, a lo largo de cuyo mandato se articuloacute; la trama, semejante desplazandolo hacia el pelo como Baacute;rcenas amenaza Actualmente con denunciar con pelos y no ha transpirado sentilde;ales.

Ese fue el lastre que ha pesado acerca de su jefatura desde el primer instante. Y ha sido incapaz de librarse de ese lastre. Seguramente porque era imposible. Pero en cualquier caso, las intentos, coreados disciplinadamente inclusive la saciedad por las terminales mediaacute;ticas, desde el sobre reiterar que la corrupcioacute;n era un asunto del anterior al de aseverar que el tema sobre los ERE andaluces confirmaba que en el PSOE pasaba lo mismo, han sido pateacute;ticos. El PP no ha sido apto sobre borrar la apariencia que creoacute; la supuesta infidencia sobre Eduardo Zaplana, aquello de que eacute;l estaba en poliacute;tica de elaborar dinero. Por motivo de que con muy pocas excepciones, que las hay, las dirigentes que se han sucedido en los cuadros sobre mando del PP en las uacute;ltimas deacute;cadas lo han hecho asi­ como demasiado. Empezando por Joseacute; Mariacute;a Aznar.

Salir de ese agujero nunca va a ser faacute;cil y llevaraacute; tiempo. Lo de refundar el partido que ahora algunos preconizan es una expresioacute;n carente demasiado fundamento. Lo que tiene que hacer el PP es deshacerse de todo el mundo cuantos han tenido que ver con la direccioacute;n del partido a lo largo de la extendida fase de la corrupcioacute;n y aprestarse a capitalizar el grande espectro sobre centro-derecha que hay en Espantilde;a desplazandolo hacia el pelo que va a seguir ahiacute; pase lo que pase.

De eso precisa caras novedosas, la higiene an extremo. Alberto Nuacute;ntilde;ez Feijoacute;o resulta una sobre ellas.

No porque su trayectoria sea impoluta, que eso no existe casi nunca asi­ como en ninguna vivienda, sino por motivo de que ha estado alejado a lo largo de abundante lapso del nuacute;cleo del permitirse madrilentilde;o, por motivo de que vale como poliacute;tico y no ha transpirado por motivo de que ha tenido un genial eacute;xito electoral en Galicia.

Viene siendo la alternativa desde realiza lapso, pero eacute;l no ha querido implicarse en la contienda por el lograr. Seguramente porque ha comprendido que entrar en esas guerras entretanto el siacute;ndrome de la corrupcioacute;n seguiacute;a paralizando el PP era lo que menos le conveniacute;a. En la actualidad ya no va an alcanzar ver hacia otro ala. Por motivo de que el fracaso sobre Casado, por sus limitaciones asi­ como el lamentable estado en que la corrupcioacute;n ha venido sumiendo a su partido, amenaza con males demasiado peores.

Sin embargo en las mentideros de la prensa madrilentilde;a se dice con insistencia que a Feijoacute;o le ha surgido una enorme rival para acceder al liderazgo en la ser de Isabel Diacute;az Ayuso. Que los numeritos asi­ como las excentricidades que con frecuencia creciente protagoniza la presidenta de la colectividad sobre Madrid soacute;lo se explican por su voluntad sobre senalar, sobre mostrarse igual que alguien diferente del comuacute;n de las dirigentes del PP. Con las ojos puestos en alcanzar a las mayores alturas del partido. Desplazandolo hacia el pelo que quien dirige esa estrategia Incluso las menores pormenores es su lider sobre gabinete, Miguel Aacute;ngel Rodriacute;guez (MAR), que nunca desea sino repetir el exitoso prueba que llevoacute; a la praacute;ctica con Joseacute; Mariacute;a Aznar realiza 25 antilde;os.

La prensa de izquierdas se regodea con la mediocridad asi­ como las salidas de tono de la sentilde;ora Ayuso. A MAR eso le da igual. Lo que le importa es que se hable sobre la novia, no obstante sea mal, como se deciacute;a que queriacute;an en Hollywood las representantes Con El Fin De sus estrellas. A eacute;l le importa poquito lo que diga la izquierda. Como cuando cogioacute; en las manos a un Joseacute; Mariacute;a Aznar, que por lo tanto nunca llegaba ni a mediocre, y no ha transpirado lo manipuloacute; Incluso inventar de eacute;l un astro. Y no ha transpirado eso seri­a lo que empieza a ser la presidenta sobre la colectividad de Madrid.